Zalek

Fue el más grande vampiro que haya existido.

Su cabeza

Clavada en una pica.

Para cazarlo tuvieron que sacrificar

3.000 esclavos,

3.000 hombres

fueron crucificados.

La única manera de cazar al vampiro, con sangre,

mucha sangre.

Tanta sangre que no pudiera distinguir el olor del aceite

y las cruces.

-El cielo ha traído un festín.-

Las llamas cruzan el aire quemándolo todo

en una llamarada.

Cruces en los ojos y quemándose las alas

aullaba salvajemente.

Las redes ya estaban puestas

Los cazadores,

Arcángeles

Bajaron del cielo y lo hicieron caer.

1

Brian lee la fecha del pié de la antigua página -1.627 –

De alguna manera particular que no puede explicar siempre se sintió atraído por las historias de vampiros por eso vino a esta exposición tan especial, buscando en páginas escritas en otros tiempos, objetos recolectados por todo el mundo, incluso un cráneo con sus colmillos se exhibe bajo una cúpula de cristal sellada con 4 cruces cómo auténtico.

 

La clásica maleta del cazador de vampiros con sus estacas y los compartimentos para el agua bendita, en otra vitrina a su lado dos ejemplares de un pequeño libro, uno cerrado y otro abierto en una página que señala cómo si se tratara de una galleta de la fortuna escrita con pluma en una letra extremadamente fina:

– “Todo vampiro tiene su cazador”.

El libro, titulado “Código V” es otro de esos libros raros de autores desconocidos, escrito a finales de la segunda guerra mundial que se hace suponer el Código de los vampiros, impreso en Buenos Aires un manual de supervivencia propuesto por la misma raza para coexistir en equilibrio con el mundo de los humanos.

En otro salón las fotos y pósters de los principales vampiros del cine, Bela Lugosi, Christofer Lee, Gary Oldman y por supuesto el Nosferatu de 1922 de  Friedrich Wilhem Murnau , historias fantásticas contadas por el cine piensa Brian y se toma su tiempo contemplando imágenes y objetos antiguos cargados de historias, leyendas y misterio.

De alguna manera el tiempo se distorsiona pero Brian no puede darse cuenta sin querer fue entrando   en una especie de trance leve del que lo despierta una voz que le dice: - Ya vamos a cerrar.

Brian camina por la gótica ciudad de Buenos Aires, una brisa fresca lo envuelve mientras el sol cae y una hermosa luna llena comienza a salir detrás de las cúpulas de una catedral.

El rojo brillante de los semáforos que nunca deja de pintar esa línea hasta el infinito.

Brian se entrega cómo si pudiera disolverse al viento que sopla y se deja llevar por las calles cómo si flotara, algo hay en la noche, no puede darse cuenta de que es pero la sensación de ensueño persiste.

2

La obsesión se hizo más intensa después del último abandono.

Brian recuerda esa última noche, estaban tan felices, parecía que habían conquistado el futuro y todas las batallas que se les fueron presentando, esa noche fue perfecta.

Rieron mucho, no hubo sexo, de eso ya habían tenido bastante durante la semana así que sólo amor porque esa noche había que descansar, así se durmieron tomados de la mano con Ana, con una sonrisa pintada en los labios.

Despertaron al rato, la acompañó a tomar el bus de las 4,30 am que la deja justo para tomar otro bus que la deja en su trabajo.

 Ana entra a las  6 am a cuidar a una señora de 101 años , cayó un chaparrón, se refugiaron bajo el techo de la parada y se abrazaron y se besaron tiernamente ,a Brian esa sensación de brindarle abrigo y protección lo hace sentir el hombre más pleno del mundo, ya llevan más de medio año juntos.

 Esa fue para Brian la noche más tierna que el sintió haber vivido en toda su vida, todo ese amor, toda esa entrega.

Ana nunca volvió.

 Y no porque muriera ni nada tan extremo, simplemente nunca más volvió.

Cómo si esta mujer de 101 años llegó a pensar Brian, hubiera hecho algo, el ya había visto la marca de las mordidas además.

Ana lo atribuyó a una araña y Brian se pasó las dos semanas anteriores a la noche final curando su herida mas otras heridas misteriosas atribuidas también a insectos del lugar, una casa apartada de la zona urbana.

 De repente  el turno de 27 horas corridas se convirtió en un turno de 35 y así los tres días de trabajo semanal se convirtieron en 9 y el silencio, la distancia y la indiferencia repentina de Ana hacia Brian se hizo completa, cómo si la persona que Brian conoció hubiera dejado repentinamente de existir.

10 días sin saber nada y Brian decide esperar un hueco entre los descansos de Ana para devolverle todas las cosas personales que dejó en su casa.

El proceso dura apenas segundos en que Ana escondida detrás de unos lentes negros abre la reja estira la mano y se despide con un:- Gracias.

El frío envolvió el corazón de Brian, la ansiedad por las noches, el dolor durante el día, las madrugadas vacías, la oscuridad de su cuarto invadiéndolo por dentro cómo un hongo que crece  y para dejar de recordar, para dejar de pensar en porqué? Porque así ?

Frustración, Ira, vacío y Brian empieza a pensar en quienes son los verdaderos monstruos?

Entonces fue que comenzaron los sueños y los dibujos.

Precipitándose al despertar a tomar la pluma o en medio de la noche simplemente mirando el vacío empezó a sentirse parte de la familia, al fin y al cabo era lo que anhelaba, una familia y en estos dibujos Brian comenzó a encontrar una profunda y muy placentera paz.

Una sensación de eternidad, una nueva fascinación incluso una nueva creencia de haber creado una especie de conexión telepática hasta sentir un poder nuevo y entonces dio las gracias, dio gracias a esa muerte en vida, a esa mujer de 101 años que le arrebató todo lo bueno que tenía en su corazón, a la mordida salvaje y despiadada de la indiferencia de quien hasta esa última noche lo besaba apasionada y tiernamente y le decía que lo amaba llenando de una calma extrema su corazón.

3

 Hasta ese momento Brian nunca se había encontrado con su propia oscuridad y ahora pudo verla parada delante de él, enorme, de más de tres metros de altura, con sus largas manos con sus largos y puntiagudos dedos que se apoyan en sus hombros.

Ana se recuesta arrollada en un sillón al costado de la cama de Madame Olga una anciana de 101 años a la que en principio debería cuidar tan sólo los domingos por 24 horas cubriendo a una compañera que misteriosamente dejó de ir, otras 4 compañeras cubrirían la semana pero no pasaron tres meses de haber comenzado que sólo quedaban tres para cubrir todos los turnos hasta que de repente no había nadie más que ella.

Ana pensó en la plata, por fin, dos días atrás en casa de Brian meditando pidió trabajo, mas trabajo , luego de fallecer repentinamente la mujer a la que cuidaba antes se vio parada varios meses en una situación muy complicada  y pidió más trabajo al universo y se le cumplió.

 Se sintió importante, se sintió de verdad necesitada, por fin recobrar de a poco su independencia, de alguna manera la vida allí en esa casa se volvió más seductora aunque de repente haya comenzado a estar siempre al borde del desmayo por falta de descanso y los mensajes de Brian reclamándole tiempo juntos enseguida se hicieron una carga.

Brian es un hombre grande puede cuidarse solo y muchas frases más cómo esta fueron cruzando por su mente mientras los días comenzaban a pasar , uno, dos,  tres ,…10 días pasaron desde ese domingo sin ninguna clase de comunicación y los mensajes de Brian intentando arreglar las cosas o hacer contacto cayeron en el vacío .

Suena el timbre, apenas llegó a su casa a dormir.

Brian le muestra una bolsa negra en la que trae todas sus cosas Ana casi sin fuerzas y sólo pensando en dormir abre la puerta, toma la bolsa dice:-Gracias-  y vuelve a su cama mientras Brian vuelve a su casa procesando el momento amargo pero que él siente cómo liberador.

Una vida de necesidad no da muchas opciones y Ana decidió dedicarse a esta mujer al 100 %.

Así cada noche se duerme arrollada en un sillón.

Son aproximadamente las 3 am cuando la señora comienza a moverse, muy lentamente su cuerpo se deforma en silencio, sus huesos se estiran y cómo dejándose llevar por una fuerza magnética gira sobre sí misma y se arrastra cómo una serpiente  desplazándose fuera de la cama hacia Ana, su cuello también se estira muy lento cómo una tortuga de pantano ,los ojos dos bolas rojas inyectadas en sangre mientras que de su boca desdentada se asoman al centro dos finos colmillos listos para clavarse en la carne de su cuidadora.

Brian despierta sobresaltado por el sueño que acaba de tener, no le había pasado hasta ahora de soñar con Ana aunque durante el día no dejaba de pensar en ella todo el tiempo hiciera lo que hiciera todavía se negaba a dejar ir esta conexión que seguía sintiendo cómo una influencia positiva en su vida.

Quizás y seguramente fue ese sentimiento sostenido en el tiempo lo que trajo a Ana a su puerta una noche mes y medio más tarde.

El recuerdo del primer encuentro se choca con la sensación de que este va a ser el último, aquella noche en que los cuerpos se pegaron y el abrazo se hizo tan natural, tan cálido tan inevitable, era tan necesario buscarse la boca para besarse y cada uno de esos besos era oxígeno para el alma.

Ana está parada frente a la puerta, mira hacia abajo, no mira a los ojos a Brian aún.

Brian le habló tantas veces al vacío y ahora no sabe qué decir, la mira en silencio hasta que ella le habla

– Vas a dejarme entrar?

Fin

 

Uno de vampiros




Este cuento thriller de terror psicológico ha sido inspirado en dos guiones desarrollados por este autor que los saluda, el primero de ellos finalista en FOX Latina 2016 y el segundo participa nuevamente en 2018 si quieren ir mas allá los pueden disfrutar acá.

http://martincodigov.blogspot.com

Si bien la historia está basada en hechos reales todos los sucesos son pura ficción catártica.

Martín Pelé 2023

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